Clicky

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Cuando obligues a otro a actuar deberás ser tú quien en todo momento ejerza el control.

Siempre es mejor lograr que tu contrincante se acerque a ti y abandone, en este proceso, sus propios planes.

Atraélo con ganancias fabulosas… y después procede a atacar.

Tú tienes todos los ases en la mano.