Marc Morano, antiguo miembro del gobierno estadounidense y autor de «The Great Reset», sobre el reciente discurso de Klaus Schwab en el B20:
«Está hablando de que esencialmente renunciemos a la soberanía nacional, a las libertades individuales y dejemos el gobierno en manos de expertos… Toda esta agenda consiste en hacer que no tengamos elección en algunas de las cuestiones más importantes de nuestras vidas».
«No pudimos votar si se prohibirían los coches de gas, no votamos por los mandatos de vacunas, no votamos por los cierres patronales, no votamos por la prohibición de la carne. Pero todo esto está sucediendo, porque en estas reuniones como el Foro Económico Mundial y las Naciones Unidas, se reúnen y trabajan con la connivencia gobierno-corporaciones para eludir la democracia e imponer cosas a través de este fascismo del gobierno corporativo.»
Leed atentamente y compartid con todos aquellos a los que les han tomado el pelo a base de bien.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó en Marzo de 2019 la Estrategia Mundial contra la Gripe 2019-2030 para «proteger» a las personas de todos los países de la amenaza que representa esta enfermedad.
Los objetivos de la estrategia dicen que son:
– prevenir la gripe estacional,
– evitar que la enfermedad se propague de los animales a los seres humanos y
– prepararse para la próxima pandemia de gripe (que luego llamaron COVID) .
El terrorista Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la Organización, dijo:
«La amenaza de una pandemia de gripe sigue presente. El riesgo de que un nuevo virus de la gripe se propague de los animales a los seres humanos y cause una pandemia es constante y real.
La cuestión no es saber si habrá una nueva pandemia de gripe, sino cuándo ocurrirá (o sea cuándo empiezan la propaganda).
Debemos mantener la vigilancia y prepararnos, porque el costo de una gran epidemia será muy superior al de la prevención».
El psicópata Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial dice: El futuro es el comunismo corporativo.
«Creo que el futuro no es el capitalismo de Estado ni el capitalismo de accionistas.
El futuro es lo que yo llamo el capitalismo de las partes interesadas, que se combina con la responsabilidad social».
Como se explica en un artículo del Washington Times, «el capitalismo de los accionistas es comunismo disfrazado».
«Bajo un sistema stakeholder imaginado por el WEF, los bancos no prestarían a las empresas que no cumplieran, por ejemplo, las políticas de cambio climático o, digamos, los mandatos de vacunación.
Los inversores no invertirían si el FEM no lo aprueba.
– Las aseguradoras no asegurarían,
– los gobiernos no permitirían,
– los promotores no desarrollarían, los constructores no construirían,etcétera, etcétera.
El gobierno, a través de socios y amigos en los negocios, sería el que movería los hilos entre bastidores».