Dr. Ian Plimer: «Los gobiernos necesitan una crisis con la que atemorizar a la gente, para poder controlarla con mayor eficacia, razón por la cual sólo reciben financiación los científicos que impulsan la fraudulenta narrativa de la «crisis climática» inducida por el hombre».
Para la gentuza que defiende la maldita Agenda 2030 es fundamental que las nuevas generaciones tengan asumidos e interiorizados los conceptos clave que fundamentan el nuevo orden que quieren implantar.
Conceptos como ideología de género, cambio climático o el laicismo son impuestos en todas las materias para transformar la manera de pensar de los más jóvenes, incluso en contra de los criterios y creencias de sus padres.
Esta manipulación de las mentes de los niños se realiza fundamentalmente en los colegios, pero también a través de contenidos culturales, como libros, películas, series de televisión, juguetes, etc.
Para poder controlar mejor el proceso obligan a los centros escolares a introducir estas ideologías en sus temarios, bajo la amenaza de quitar subvenciones, imponiendo multas o incluso con el cierre de los colegios que no se adhieran. Igualmente, persiguen y proscriben a los profesores que no se plieguen a estos mandatos.
Además, esto lo combinan con una relajación en las exigencias curriculares y con una devaluación de la autoridad del profesor, fomentando alumnos poco acostumbrados al esfuerzo y con pocos conocimientos en materias clave como la historia o la filosofía, lo que los hace menos capaces de pensar por sí mismos y más permeables a las ideas con las que los quieren adoctrinar.
¿Cómo lo están haciendo ?
– Imponen estas ideas en los temarios de todas las asignaturas para normalizarlas y que sean más fácilmente asumibles.
– Hacen hincapié especialmente en cambiar la enseñanza de la historia y la literatura, como formas de modificar el pensamiento de los estudiantes.
– Aprueban leyes que persiguen a centros y trabajadores (directores, profesores, etc.) que no sigan sus consignas.
– Sancionan y denuncian a centros y profesionales que ofrezcen resistencia.
– Promueven la enseñanza pública, que es la que mejor pueden controlar, y asfixian poco a poco cualquier iniciativa de enseñanza privada o concertada.
– Establecen normas de convivencia contrarias al orden natural, fomentando talleres y charlas sobre género, asignaturas de sexualidad en niños, etc.
– Dificultan que los padres ejerzan su derecho constitucional a decidir la educación que quieren para sus hijos.
– Promueven y subvencionan contenidos culturales que introduzcan y extiendan las ideologías dominantes en libros y contenidos audiovisuales.
– Promueven planes de estudio y leyes educativas cada vez más laxas en las que se priorizan las experiencias a los conocimientos, no se valora el esfuerzo y se eliminan las pruebas de evaluación objetivas.
Cada vez que se produce un nuevo acontecimiento en el mundo, se añaden nuevas distracciones a la lista de temas tratados por los llamados disidentes.
La última gira en torno a «armas especiales que provocan incendios y controlan mentes». No sabemos si es cierto y ni siquiera nos incumbe.
Como disidentes serios deberíamos centrarnos en tratar de difundir información que se pueda demostrar sin lugar a dudas, en lugar de seguir la corriente a cualquier tontería que nos arrojen (quién sabe quién) para distraer y desacreditar.
Nuestro trabajo debe consistir en intentar abrir los ojos a aquellos que dudan con razón sobre el status quo, pero que, por una razón u otra, siguen negándose a creer que somos gobernados por unos criminales corruptos controlados por poderes oscuros internacionales.
Por ello, nosotros nos centrarenos en pocos temas importantes:
* El fraude del Covid
* La farsa del cambio climático
* Rechazo absoluto a la Agenda 2030
* Desobediencia firme a todas las directivas criminales que van contra nuestra libertad y derechos fundamentales
* Señalamiento de todos los criminales que están causando tanto daño a la sociedad
Todo lo demás son puras cortinas de humo que solamente nos desvían del foco principal.
Una forma muy efectiva de frenar el crecimiento de la población es implantar leyes que promuevan el aborto como un derecho en todo el mundo, con el resultado de millones de niños matados en el vientre de sus madres cada año.
Otra de las medidas es fomentar una cultura de la anticoncepción en la que tener hijos esté mal visto y se considere un mal que hay que evitar a toda costa, como siempre por motivos ecológicos y argumentos de sostenibilidad.
Todo esto lo están escondiendo con la excusa de «garantizar el acceso universal a los servicios de salud sexual y reproductiva de las mujeres».
¿Cómo lo están haciendo ?
– Declarando por ley que el aborto es un derecho – Castigando cualquier iniciativa que busque salvar la vida de esos niños. – Penalizando cualquier ayuda alternativa que se ofrezca a las madres embarazadas. – Promoviendo el aborto especialmente entre menores de edad, sin el conocimiento de sus padres. – Obligando a los países a aprobar leyes a favor del aborto y la anticoncepción para obtener a cambio ayudas y recursos para mejorar otras áreas de la salud o luchar contra enfermedades como la malaria o la tuberculosis. – Desincentivando la procreación, quitando ayudas y derechos a las familias numerosas. – Generando un ambiente social beligerante contra la maternidad, especialmente contra aquellos que tengan más de un hijo.
¿Lo vamos viendo? Porque es la cruda realidad de lo que sufrimos a diario ¿eh?
Vamos a analizar el segundo de los ODS de la #Agenda2030:
«Lucha contra el hambre «
La solución que ofrecen para erradicar el hambre es que la producción de alimentos a nivel mundial se concentre en muy pocas manos (las suyas) y así ellos podrán producir, controlar y distribuir los alimentos, según los criterios que favorezcan a sus planes.
Os dicen que hay que desarrollar un cambio profundo en el sistema agroalimentario mundial para favorecer la productividad agrícola y la producción alimentaria sostenible. Y la solución es que ese nuevo sistema esté gestionado por ellos, mediante legislaciones cada vez más estrictas que desincentiven y arruinen las iniciativas agrícolas particulares, y acaparando ellos cada vez más los terrenos agrícolas.
Después controlarán el tipo y la cantidad de alimentos que puede consumir cada persona, según supuestos criterios de salud y sostenibilidad, pudiendo premiar o castigar las conductas que contravengan el orden establecido.
¿Cómo lo están haciendo ?
– Promoviendo la escasez y el encarecimiento de materias primas – Promoviendo leyes que desincentiven el cultivo y la ganadería (Ley de Restauración de la naturaleza) – Promoviendo el aumento de los precios de los transportes – Adquiriendo grandes extensiones de terreno que ya no son rentables a sus legítimos dueños. – Estableciendo planes de alimentación a nivel mundial en base a criterios e intereses espurios.
¿Vamos entendiendo lo que está pasando en el mundo?
Ya sabes : Quieren monopolizar nuestra alimentación